domingo, 18 de diciembre de 2011

MENOS ES MÁS


Hoy comía solo en casa y como soy un cotilla aparte de un cocinillas, me encanta ir al supermercado a descubrir que de nuevo me ofrece la moderna industria de la alimentación.

 Hoy en día, las empresas dedicadas a los preparados alimenticios, cada vez nos ofrecen una variedad más amplia de productos listos para ser consumidos. Sobretodo ahora, en fechas navideñas,  y de cuatro o cinco años a esta parte, las piernas de cordero rellenas, los “famosos capones de Cascajares”, los costillares, los “rotís” el cochinillo y toda la demás familia de cárnicas listas para “calentar y servir”, han invadido los estantes de los supermercados patrios para evitarle al ama (u amo) de casa, el tener que tirarse horas en la cocina,  para poner en su mesa ricas viandas navideñas.

 Pues bien, el otro día compre un muslo de pato, ya cocinado, que envasado al vacío se ofertaba en la sección de carnes del Mercadona. Lo compré más que nada por gula, (para que lo voy a negar) y lo tenía en la nevera en espera de darle un uso adecuado. Para que recordaros que mi chica nada más lo vio, me preguntó que para que había comprado “Eso”.  Hace unos años, en Paris, pedí para cenar una “salade avec Gesiers” para los dos, que es una ensalada con mollejas de pato y la engañé diciéndole que era jamón de pato para que se comiera la ensalada, (ni que decir tiene que los “gesiers” me los comí yo) por que si llega a saber que eran mollejas no toca ni la ensalada.




Así, como decía, hoy que comía solo he decidido hacerme un plato tipo “haute cuissin” con el muslito en cuestión. Así que he cortado en juliana una cebolleta y medio pimiento y los he salteado en abundante aceite (que narices, un día es un día) amén de una típica ensaladita de lechuga y tomate (de toda la vida) pero muy cortadita y aliñada con balsámico. El muslo lo he simplemente calentado al microondas y como podréis ver en la última foto, he dejado los huesos mondos y lirondos.

                                      

Alea Jacta Est

2 comentarios:

  1. Me parece muy bien. Un día es un día. Y la idea del plato del antes y el después, me parece genial.
    Gracias por la receta de falafel pastores. Tengo que confesar que nunca los probé. Aunque parezca mentira mi primer kebab lo comí apenas un año. Y me parece que no son muy complicados de hacer no?

    ResponderEliminar
  2. Que vá, son muy sencillos de hacer y están increiblemente ricos y la salsa es muy simple. Picas unas hojas de hierbabuena, bates un yogurt, le pones sal, pimienta y la hierbabuena y a comer.

    ResponderEliminar